jueves, 28 de noviembre de 2013

Maria Magdalena 2

Su mirada es amesadora, camina como si desafiase a la muerte, últimamente su mente piensa cosas, cosas extrañas y sobre naturales, mientras camina enciende un cigarro, jamás le ha encontrado sabor o gusto, pero lo hace como una rutina, día tras día, tras día, sube a su carro un Ford shelby del año, algunas mujeres les gustaría subirse a ese carro, si tan solo supieran que en la cajuela permanese un cadáver fresco y ensangrentado.
Maria Magdalena mira a su alguna ves amiga Inés, esta le mira extrañada, maria, aquí esta mi hija?, ella sonrio, claro pasa, pandora mira a su madre, aquí esta, es hermosa se nota que te esforsaste, maria guiño un ojo a pandora, maria yo, maria la beso en los labios, no tienes por que agradecermelo,  Inés se asusto, maria te conozco bien, no habrás hecho algo con mi hija?, maria se enojo y la cacheteo, como te atreves a decir algo así de mi, ella se me atravesó y la golpie con el carro y tu solo piensas en sexo, maldita perra embustera, maria la arrojo al suelo, eres una sucia mujersuela que solo piensa en si misma, seguro vas por la vida cogiendote a cuanto cabron se te pone en frente, pero después te sientes culpable y sucia, eres solo una perra temerosa del don mas glorioso que nos dio dios o lo que sea que nos trajo a este mundo, el poder amarnos y no solo revolcarnos por placer, yo te amaba y tu eras una perra y me abandonaste con ese puto licenciado, yo te amaba y te saque de ese puto orfanato y tu me pagaste como las putas pagan a los buenos hombres que tienen la desdicha de enamorarse de ellas, me abandonaste, me juraste que eras mia y que serias la única de mi vida, pero desidiste jugar conmigo, con mis sentimientos, donde esta ese puto abogado ahora?, cuestiono maria aplastando su estomago con el pie, déjame!, suplico Inés,  dímelo!, Inés contesto sin aire, me dejo por otra!, maria río, la soledad, el castigo de las putas de tu calaña, dijo maria mientras se sentaba y admiraba a pandora que estaba atemorizada, el pantano puede dar bellas rosas a un, maria beso a pandora y la sentó  en su regazo, maria perdoname, dijo suplicante Inés, ella contesto, largo de aquí!, maria la cacheteo con tal fuerza que Inés cayo en el suelo, señora por favor ya no le pegue a mi madre, maria observo  a pandora, lo haré por que tu me lo pides, dijo maria mientras acarisiaba su pierna, eres tan parecida a tu padre, tienes lo mejor de ese desgrasiado, pandora se sorprendió, usted conoció a mi padre?, maria río, claro que lo conocí, ese perro bastardo trato de seducirme incluso cuando quería hacer de de tu madre su novia, Inés se sorprendió, que no lo sabias, tu marido era solo un pelafustán que esperaba a que una pendeja cayera, si fue tu marido claro, dijo con una sonrisa cínica, pandora observo a maria, perdoname que hayas visto todo esto princesa, ni tengo efectivo para pagar tu bicicleta, si tu madre algún te deja volver a mi casa yo te la pagare, pandora ayudo a su madre a pararse, no se preocupe, dijo pandora, Inés observo a maria magdalena, maria, dijo una entristecida Inés, maria la tomo y la beso, ines no se resistió a ese beso que la amedrentaba, pandora observaba atenta, maria  dijo para si misma, corazón que débil eres cayendo en las mismas piedras del pasado, maria tumbo a ines en el sofá y le dio un beso tan apasionado que encendía las cenizas del pasado en que dos niñas pubertad jugaban a amarse mientras vivían un cautiverio impuesto por un sociedad hipócrita, la recorrió con su manos, todo su cuerpo vibraba a las manos de maria que deseaba mas que un simple acoston, quería olvidar un pasado lleno de dolor y desilucion provocado por años de soledad y promesas rotas, maria desnudo a Inés y se comió su concha y sus tetas, espera mi hija nos observa, maria sonrio y vio a la jovencita, pero que mal educada soy, pandora ven aquí, ella se acercó, desnudate, pandora se sorprendió pero lo hizo, maria la acerco y le dio un beso, es hora de que tu conozcas a tu madre, pandora se sorprendió, pero los besos de maria fueron muy convincentes, pandora lamia la concha de su madre, para después intercambiar besos con maria, Inés se sentía gozar como nunca, juntas la hicieron venirse varias veces, acto seguido pandora termino en el sillón, su madre y maria le recetaban la misma docis de placer, admira a tu hija a un es virgen, dijo maria, pandora gozaba mientras su propia madre se comía sus tetas y maria su concha, ante esto pandora no pudo más que perderse en un mar de placer, nada de reglas o mojigaterias, todo era place, todo era gozo de la carne, pero maria ya planeaba algo mas, las levanto y las coloco concha contra concha y ambas gozaban de ma otra, sus gemidos eran delisiosos llenos de sed como el sediento que se muere de sed en el desierto, ambas en una lucha titánica de clítoris contra clítoris se corrieron, primero pandora y después Inés, ambas se besaron, maria sonrio, vaya eso si es amor, pandora se arrojo sobre maria y dijo es su turno señora, maria sonrio mientras pandora la besaba, ines le desnudo arrojando su falda y su ropa interior al suelo,  pandora le quito el brasier y se comió esad tetas enormes que ella poseía, maria mientras la besaba introdujo su dedo medio en el ano de pandora que gimió tímidamente, madre e hija se comían a esa espectacular mujer que era maria, dios sigan, dios mío!, exclamaba maria llena de placer, pandora e Inés se concentraron en el clítoris de maria con sus lenguas, eso la volvía loca, ines y pandora se besaban a veces y maria se sentía en otro planeta, maria se vino en un chorro de líquidos vaginales sobre ambas, Inés lamió ese liquido y enseño a su propia hija a tragárselo, maria sin mas las beso y compartieron besos delisiosos.

lunes, 18 de noviembre de 2013

Maria Magdalena


Maria ayudo a pasar a la jovensita a su casa, Pandora era una jovencita de piel morena clara, llamativa y con cuerpo deportivo y delisioso, Maria la dejo en el sofa y le sonrio;

-perdoname, fue mi culpa-

la jovencita sonrio;

-gracias señora, pero fue mi culpa y nada mas, ¿podria llamar a mi madre?-

Maria asintio y fue por el telefono;

-yo te llevo a casa si quieres-

Pandora sonrio;

-grasias, pero mi madre vendra por mi-

Maria sonrio y le deja llamar por telefono, la joven llamo a su madre, Maria observo a la jovencita, era muy bella, dentro de ella ardio la pasion por poser ese cuerpo, como siempre sucedia, ella conseguia lo que queria siempre, por lo que despues de que la jovencita llamo por telefono se acerco y acaricio su pelo;

-Pandora, eres muy bonita-

la jovencita sonrio y se ruboriso;

-niña, quisiera ver tu caja Pandora-

la joven se hecho para atras de un salto;

-señora, lo del accidente fue mi culpa yo...-

Maria se acerco, acaricio su pelo y le dio un beso en sus labios rosas de color natural;

-tranquila mi niña-

Maria se deleito de esos labios una ves mas, Pandora luchaba en sus adentros pero aquello resultaba irresistible;

-señora-

dijo mientras se perdia en los besos de Maria;

-dejame probar tus mieles-

Maria beso su cuello y desendio, paso por sus pechos la blusa estorbo, para besarlos y apretarlos, eran pequeños pero erectos y muy finos;

-mira nada mas, con estos podria terminar de alimentar a mi hija menor-

Maria se acerco mas abajo y le quito el pants deportivo, beso sus piernas y se acerco a su zona erogena, su hermosa concha protegida por su ropa interior;

-señora-

dijo la jovencita, tapandose;

-perdon-

dijo Maria;

-no queria hacerte sentir incomoda, es solo que-

Pandora observo a la mujer;

-desde que murio mi marido, yo no soy la misma-

Pandora vio su tristeza;

-señora yo...-

Maria la beso, la acosto y su mano se topo con ropa interior, donde masageo con suavidad, Maria se acerco y lamio su ropa interior, con cuidado se la quito, era una hermosa niña de 15 años, virgen, Maria sonrio;

-eres vinrgen mi amor, no te preocupes, yo cuidare tu secreto-

sin mas le dio de besos, lamidas, chupadas a su clitoris, Pandora se sintio como nunca, estaba a merced de una mujer experta en las artes del sexo y de todas sus oscuras facetas;

-señora-

dijo Pandora mientras se venia y sentia el primer orgasmo de su vida;

-es tu turno princesa-

dijo Maria mientas se desnudaba;

-yo no se-

Maria la recosto;

-dejate llevar-

Pandora se acerco a Maria y la beso, lamio su cuello y desendio por sus pechos que eran enormes, bajo y paso por su vientre exquisito y plano;

-dios lo haces bien-

dijo Maria, Pandora llego por fin al centro erogeno de Maria, su concha con cuidado y mucho respeto lamio y beso, Maria sintio su cuerpo que flotaba, mas por que era una jovencita desconocida la que lo hacia, sus manos fueron a su propio clitoris, donde se masturbo y con ayuda de Pandorase vino Maria beso a la jovencita;

-Pandora, tengo una hija de tu edad, es muy guapa y tu me recuerdas a ella-

Pandora sonrio, la puerta fue tocada, Maria le ordeno;

-tu madre, ve vestirte-

ella obedecio y se pregunto que estaba haciendo, pero al ver la sensual figura de Maria se dejo llevar y penso mas y se cambio.