El macho marca su territorio asi ha sido siempre...

El macho marca su territorio asi ha sido siempre...

Mi madre fue dura conmigo, al grado de casi la tortura, por eso creo que en parte desprecio a las mujeres, creo que son de lo peor, pero todo empeoro en mi casa despues que mi hermana huyo de la casa, mi madre comensaba a sacr los dientes y me golpeaba y me castigaba a mi por que, supongo yo era como su escape, a mi si podia golpearme y subajarme, pero mi padre llegaba y me defendia, por que quiza yo era su cachorro, al que debia enseñar, un dia, que mi madre me amarro de la cama, para que no me portara mal, mi padre me encontro y se armo la de dios padre, mi padre la tomo del cuello y la arrastro hasta su alcoba, donde hubo un silencio sepulcral, el estaba como loco, lo sabia por que no hablaba, cuando estaba asi, no decia nada, pero su mirada era cruel, por eso supe que algo andba mal, quiza tardo una hora, quiza menos, el regreso con mi madre, esta ves ella me desamarro, con su lengua, como una sumisa gata me lamio las heridas, producidas por el alambre metalico con el que me amarro, mis manos pequeñas se habian señido con el alambre y la mano izquierda sangraba, ella me abrazo y empezo a acariciarme, yo con mi mente infantil sin saber si odiarla o amarla, la abraze, entonces me di cuenta que en el brazo llevaba una horrible quemadura, estas eran las iniciales de mi padre.

Esa noche estaba algo agotado, trabajo, estres, no lo se, por lo que decidi sacarla a pasear, le ordene que se pusiera ropa de cuero y una blusa negra, una mini falda de cuero y en su cuello le coloque una correa para perros, ella no dijo nada, le acaricie el rostro y ella me vio con espectacion;

-no intentes nada estupido-

ella contesto;

-he visto lo que haces, prefiero obedecer a morir-

yo sonrei, la lleve como se lleva a un perro, de cerca, corrigiendo el rumbo, mientras caminabamos la gente se nos quedaba viendo, yo no prestaba atencion, Putilla agachaba la mirada sin voltear a ver, fue entonces que llegamos a una plaza publica abarrotada de gente, donde una gran cantidad de jovenes vestidos de negro permanecian, me quede alli junto a ella viendo a la gente pasar, los jovenes nos veian atentos, hasta que un par de dulces jovencitas vestidas con ropas de colores pastel nos vieron, tendrain apenas 17 o 18 años, yo sonrei y les salude;

-¿ella es una esclava?-

yo asenti;

-es hermoza, ¿hace de todo?-

yo asenti;

-¿quieres ver?-

ella asintio con sus pelos purpura y su cara bellamente pintada, tenia unos labios rojos que su labial no escondia, su piel blanca era deliciosa;

-Putilla, lame el pie de la jovencita-

Putilla se inclino y quito el zapato de la jovencita con cuidado y poco a poco comenzo a lamer el pie pequeño de la jovencita, esto al parecer la exito, su amiga se quito el zapato y lo puso frente a ella, Putilla me vio atento;

-hazlo-

ella sin mas obedecio, esto fue divertido, los jovenes de la plaza nos vieron con atencion, fue entonces que la mayor de jovencitas tomo a su amiga y le susurro algo en el oido, la mayor se me acerco y me dijo;

-podriamos ir a un lugar privado-

yo asenti y Putilla y yo fuimos a espaldas de los baños publicos junto con las jovencitas, un joven parecia vigilar, al vernos se molesto, pero las jovencitas le dieron una señal y de pronto nos dejo en paz como si fuese una clave secreta;

-enseños como educa a su putilla-

dijo la menor de las amigas;

-no se, alguien podria llamar a la policia-

dije;

-no se preocupe, este es ivan, vende droga y los policas no se acercan, este lugar es nuestro;

-esta bien, pero de lo que ella reciba, ustedes recibiran un 10%-

ellas me vieron;

-no-

contesto la menor;

-no doy espectaculos de gratis-

Putilla me veia con la cara de no me obligues a hacer esto;

-20 golpes con el cinto asi solo recibiran 2-

ambas se vieron, la menor tenia el pelo pintado de rojo carmesi, era de piel blanca pero mucho mas blanca que su amiga;

-solo dos-

dije;

-esta bien-

dijo la mayor, me quite el cinto y pudieron verla desnuda ella, putilla se desnudo sola, sabiendo que podria empeorar todo;

-bien aqui voy-

poco a poco, putilla se preparo para aquello, el primero sono recio, fuerte y demncial, ella solo cerro los ojos y los dientes los apreto;

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Putilla me veia con los ojos llorosos;

-sigue-

dijo la mayor;

-deja que respire, ella no ira a ningun lado, putilla se acomodo y yo alse el cinto;

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-su turno-

dije, putilla se alejo mientras se acomodaba la ropa;

-bien, ¿quien primero?-

la mayor dio un paso al frente sin titubeos, se quito la blusa y pude verla, tenia unos pechos enormes y sobrenaturales;

-bien, putilla toma el cinto, tu pegaras-

la jovencita se acomodo la blusa;

-eso no es parte del trato-

exclamo la menor;

-dijimos que 10%, son solo 2, ¿se rajan?-

la mayor me mostro el dedo molesta, ya sabran cual;

-no tienen palabra-

el joven empezo a cacarear como gallina;

-basta ivan-

el joven also la voz mas fuerte;

-esta bien, no tengo miedo-

ella se quito de nuevo la blusa, putilla me vio, me preguntaba con la mirada si estaba seguro;

-hazme sentir orgulloso-

putilla tomo con fuerza el cinto y pego con fuerza, mas de lo que yo esperaba;

-¡¡¡¡hay!!!!-

gimio la jovencita;

-vamos no es para tanto-

dije;

putilla chicoteo el cinto y volvio a pegarle, esta ves con mas fuerza;

-¡¡¡¡puta!!!!!-

grito la jovencita, putilla tenia una sonrisa que me hacia sentir orgulloso;

-tu turno-

dijo putilla, la menor se quito la blusa, se le notaba el temor y el miedo, se acomodo y se preparo;

-alla voy-

dijo putilla, lo chicoteo y le pego al fin , casi podias oir el aire abrirse;

-¡¡¡¡¡ahhhhhh!!!!!-

dijo la jovencita, la cual cayo de rodillas la mayor se molesto, pero ivan se acerco y no la dejo interrumpir;

-el ultimo-

putilla se preparo y con mucho mas fuerza le pego en la espalda, la jovencita no dijo nada, pero fue ovbio que comenzo a llorar;

-es todo, se acabo-

la mayor abrazo a la mas joven, una vos interrumpio;

-que estan haciendo abigail, samira-

aquella era la voz de su madre, pero al verla me pretrifique;

-laura-

ella me vio, una mujer de 30 años, bella y hermoza pese a las canas;

-ramiro, tu....-

laura tomo del brazo a las dos jovencitas y se fueron de alli, el joven rio;

-¿se conocen?-

pregunto ivan;

-ella es mi hermana-

el joven comenzo a reir, aquellas eran sus hijas, pero putilla estaba feliz, por que al fin, se habia desquitado con alguien...